Medvedeva No pudo Soportar El Fracaso de Pyeongchang y La Competencia Interna
El lunes, 7 de mayo, la Federación Rusa de Patinaje Artístico (FFKKR) debe anunciar oficialmente que la dos veces campeóna mundial y vicecampeón de los Juegos en Pyeongchang Evgenia Medvedeva se ha separado de su antiguo mentor Eteri Tutberidze y continuará trabajando con el famoso Especialista canadiense Brian Orser.
Tales decisiones no son aceptadas en una noche. Necesitan ser coordinados, negociados en el lado financiero de la relación, resolver muchos problemas internos, especialmente cuando se trata de entrenar en el extranjero. Medvedeva, sin embargo, tuvo tiempo para pensar. Supongo que esto es lo único que hizo todo el tiempo que no pudo patinar, curando la lesión en la pierna se había agravado después de los Juegos. ¿Por qué fue demasiado claro, porque fue traicionada? Así al menospiensan aquellos que habían estado apoyando a Zhenya durante muchos años, esperaron su victoria olímpica en Corea, y cuando Medvedeva perdió por primera vez en su vida ante Alina Zagitova, se apresuraron a reducir la indignación hacia el entrenador que hizo la principal apuesta por la atleta más prometedora del grupo. ¿Pero es? Me atrevo a dudar.
No es que la entrenadoar en el medio de la temporada olímpica de repente cambió las prioridades. Primero, no fue de repente. En segundo lugar, puramente en terminos laborales, Tutberidze tenía razón: para llevar al alumno al oro olímpico, trabajó durante muchos años como condenada, sacrificando absolutamente todo. ¿Y qué debería hacer cuando Medvedeva sufrió un trauma? ¿Dejar el sueño por el hecho de que su atleta principal abandonó repentinamente el juego por un período indefinido? No estaría en absoluto en su naturaleza, y una vez un amada aprendiz como ningún otro tenía que entender esto. Más bien, Evgenia simplemente no tuvo suerte: cuando el estado de la pierna lesionada llegó a ser crítico, ya era demasiado tarde para tratarlo seriamente, y demasiado pronto para soportar la competicion en los Juegos.
¿Fue este un error de cálculo? En mi opinión, sí. Las fracturas por estrés nunca ocurren repentinamente y, si Medvedeva fallo en la serie preolímpica y del Gran Premio, es posible que un margen de seguridad sea suficiente para ganar el inicio principal. Exactamente el mismo error de cálculo se puede llamar la participación de una patinadora artística en el Campeonato de Europa: si Zhenya no hubiese perdido contra Alina Zagitova un mes antes de los Juegos, al menos tendrá la oportunidad de ganarle en Pyeongchang esos puntos que finalmente cayeron a favor del oponente. Pero Evgenia no pudo con el fracaso de verse superada por su compañera de entrenamiento.
Y así el tren se fue - todo antes del comienzo principal se hizo obvio que la numero uno del patinaje de mujeres fue reemplazada por una nueva favorita. Queda ahora solo adivinar si hubo un enfrentamiento público de las dos atletas en la víspera del inicio principal por un cálculo completamente consciente y muy preciso del entrenador. Pero incluso si es así, ¿quién está listo para condenar a Tutberidze? El país quería una medalla olímpica de oro, y la consiguió. El hecho de que fue ganado por el atleta "equivocado" ese es otro tema.
Alguien por cierto dirá: "No podría soportar la competencia". Pero desde este punto de vista, Medvedeva no necesitaba abandonar a la entrenadora: ella tenía un solo un rival dentro del grupo, además, la pubertad no era estable y aún no era superada. Antes de alcanzar el nivel adulto de la próxima oleada de talentos peligrosos y patinadores artísticos, todavía hay al menos una temporada, pero aún más: encontrar estabilidad con una complejidad tan alta de programas puede no ser algo rápido. Resulto, ¿muy doloroso para Zhenya? ¿no pudo con el fracaso de Pyeongchang?
Cuando un atleta de clase alta deja repentinamente el entrenador, la razón casi siempre está oculta en uno: ya no es interesante. El atleta creció, pero el entrenador no se dio cuenta. El atleta busca crecer más y el entrenador no puede ofrecer nada nuevo. El atleta tiene preguntas y el entrenador no encuentra una respuesta para ellas. Es imposible hacer un gran trabajo día tras día, sin entender por qué lo hace, y no sentirse seguro de que este trabajo traerá el resultado. Todo esto de alguna manera tuvo lugar en la relación de Medvedeva con su entrenador.
Tales decisiones no son aceptadas en una noche. Necesitan ser coordinados, negociados en el lado financiero de la relación, resolver muchos problemas internos, especialmente cuando se trata de entrenar en el extranjero. Medvedeva, sin embargo, tuvo tiempo para pensar. Supongo que esto es lo único que hizo todo el tiempo que no pudo patinar, curando la lesión en la pierna se había agravado después de los Juegos. ¿Por qué fue demasiado claro, porque fue traicionada? Así al menospiensan aquellos que habían estado apoyando a Zhenya durante muchos años, esperaron su victoria olímpica en Corea, y cuando Medvedeva perdió por primera vez en su vida ante Alina Zagitova, se apresuraron a reducir la indignación hacia el entrenador que hizo la principal apuesta por la atleta más prometedora del grupo. ¿Pero es? Me atrevo a dudar.
No es que la entrenadoar en el medio de la temporada olímpica de repente cambió las prioridades. Primero, no fue de repente. En segundo lugar, puramente en terminos laborales, Tutberidze tenía razón: para llevar al alumno al oro olímpico, trabajó durante muchos años como condenada, sacrificando absolutamente todo. ¿Y qué debería hacer cuando Medvedeva sufrió un trauma? ¿Dejar el sueño por el hecho de que su atleta principal abandonó repentinamente el juego por un período indefinido? No estaría en absoluto en su naturaleza, y una vez un amada aprendiz como ningún otro tenía que entender esto. Más bien, Evgenia simplemente no tuvo suerte: cuando el estado de la pierna lesionada llegó a ser crítico, ya era demasiado tarde para tratarlo seriamente, y demasiado pronto para soportar la competicion en los Juegos.
¿Fue este un error de cálculo? En mi opinión, sí. Las fracturas por estrés nunca ocurren repentinamente y, si Medvedeva fallo en la serie preolímpica y del Gran Premio, es posible que un margen de seguridad sea suficiente para ganar el inicio principal. Exactamente el mismo error de cálculo se puede llamar la participación de una patinadora artística en el Campeonato de Europa: si Zhenya no hubiese perdido contra Alina Zagitova un mes antes de los Juegos, al menos tendrá la oportunidad de ganarle en Pyeongchang esos puntos que finalmente cayeron a favor del oponente. Pero Evgenia no pudo con el fracaso de verse superada por su compañera de entrenamiento.
Y así el tren se fue - todo antes del comienzo principal se hizo obvio que la numero uno del patinaje de mujeres fue reemplazada por una nueva favorita. Queda ahora solo adivinar si hubo un enfrentamiento público de las dos atletas en la víspera del inicio principal por un cálculo completamente consciente y muy preciso del entrenador. Pero incluso si es así, ¿quién está listo para condenar a Tutberidze? El país quería una medalla olímpica de oro, y la consiguió. El hecho de que fue ganado por el atleta "equivocado" ese es otro tema.
Alguien por cierto dirá: "No podría soportar la competencia". Pero desde este punto de vista, Medvedeva no necesitaba abandonar a la entrenadora: ella tenía un solo un rival dentro del grupo, además, la pubertad no era estable y aún no era superada. Antes de alcanzar el nivel adulto de la próxima oleada de talentos peligrosos y patinadores artísticos, todavía hay al menos una temporada, pero aún más: encontrar estabilidad con una complejidad tan alta de programas puede no ser algo rápido. Resulto, ¿muy doloroso para Zhenya? ¿no pudo con el fracaso de Pyeongchang?
Cuando un atleta de clase alta deja repentinamente el entrenador, la razón casi siempre está oculta en uno: ya no es interesante. El atleta creció, pero el entrenador no se dio cuenta. El atleta busca crecer más y el entrenador no puede ofrecer nada nuevo. El atleta tiene preguntas y el entrenador no encuentra una respuesta para ellas. Es imposible hacer un gran trabajo día tras día, sin entender por qué lo hace, y no sentirse seguro de que este trabajo traerá el resultado. Todo esto de alguna manera tuvo lugar en la relación de Medvedeva con su entrenador.
que dira medvedeva?, esa es la pregunta ahora
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